lunes, 23 de marzo de 2015

Revuegirls - Jeanne Mammen





Si uno pasea por la Kurfürstendamm, la gran avenida comercial de Berlín, será muy difícil que, ocupada la vista en los escaparates de las lujosas tiendas que ocupan la popular Ku’Damm, esta repare en un pequeño rótulo situado en el número 29 de dicha avenida, en el que se indica que, en el cuarto piso de ese edificio tuvo su estudio, desde 1919 a 1976, la pintora y artista gráfica, Jeanne Mammen, (1890-1976).

En efecto, todavía es posible visitar ese pequeño estudio, vecino del lujoso hotel Kempinski, en el que esta fabulosa artista pasó casi 60 años dedicada a retratar el mundo que la rodeaba y su evolución, siempre procurando pasar desapercibida y sin formar jamás parte activa del mismo. Como ella misma dijo en una entrevista casi al final de su vida: "En realidad, siempre he querido ser sólo un par de ojos que pasan por el mundo, sólo para ver a los demás. Por desgracia, se me ha visto" 

Nacida en Berlín en 1890, en el seno de una familia acomodada, Jeanne Mammen vivió en París desde que tenía cinco años hasta 1914. Durante esos años junto con su hermana mayor Marie Louise inició su educación en las Bellas Artes en la famosa Academia Julian donde se matricularían en 1906. Dos años después marcharían a Bruselas para continuar sus estudios de pintura y dibujo en la Académie Royale des Beaux-Arts para ingresar posteriormente, en 1911, en la Scuola Libera Academica, en Villa Médicis, Roma

Todos estos años de formación marcarían el comienzo de una prometedora carrera profesional que se vería truncada por el estallido de la I Guerra Mundial. El padre, un rico comerciante de ascendencia judía se vería obligado a abandonar París y huir precipitadamente a Holanda perdiendo todos sus negocios montados en Francia. El periodo de la guerra y el regreso de toda la familia a Berlín una vez terminada esta, obligó a las hermanas Mammen a buscarse la vida en una ciudad conmocionada social y políticamente y que marcaría la producción gráfica de Jeanne durante el periodo de entreguerras en la que se llamó República de Weimar

En 1919 Jeanne, junto con su hermana, se independizarían de la familia y se marcharían a vivir a la Kurfürstendamm, al pequeño apartamento que sería su estudio y refugio durante toda su vida. 

Después de unos primeros años de carestía económica, Jeanne empezaría a desarrollar su trabajo como reportera gráfica en varias revistas tales como "Die Dame" o "Simplicisimus" convirtiéndose poco a poco en la cronista gráfica de la vida del todo BerlínSus dibujos retratarían los cafés de moda, los cabarets, las vedettes que en ellos actuaban, la gente que acudía a aquellos lugares, la moda de las mujeres, en fin, un documento gráfico que retrata a la perfección a la sociedad berlinesa de entreguerras.

De ese periodo es la obra de Mammen que hoy traemos al blog. Realizada en óleo sobre cartón  entre 1928 y 1929, retrata a dos revuegirls, dos chicas de revista que estarían actuando en alguno de los locales de moda, acompañando seguramente a alguna de las figuras que hacían furor en aquellos años en los numerosos clubs y cafés-teatro berlinéses, figuras tales como la escandalosa y desnuda bailarina Anita Berber, "la reina del cabaret", Claire Waldoff o, la revolucionaria  comediante y también bailarina, Valeska Gert.

A simple vista no parece haber grandes diferencias entre las dos showgirls del retrato. Su ropa, sus sombreros y el lápiz labial que usan son idénticos y enfatizados pero, aquí terminan sus similitudes. Jeanne exagera las diferencias anatómicas y de expresión de ambas mujeres eliminando así esa primera impresión de uniformidad en el retrato. A una de ellas la dibuja con una nariz chata o respingona mientras la otra muestra una poderosa nariz aguileña. La mujer que aparece en primer plano muestra una expresión algo adormilada, con los ojos cerrados mientras que la otra los tiene abiertos y su rostro hierático, más hundido y plano, semeja el de una máscara. También hay diferencias en el pelo de ambas así como en el volumen de su pecho. El retrato es casi un instante fugaz durante la actuación de esas dos revuegirls, tal vez una pausa en el mismo para descansar fuera del escenario o, tal vez, una pausa dentro de la misma actuación a semejanza de las famosas "Pausas" que pondría de moda Valeska Gert permaneciendo durante minutos sobre el escenario en una total quietud como representación de la necesidad de parar un momento, de rebajar esa velocidad excesiva en la que empezaba a vivir aquella sociedad de la modernidad berlinesa.

El rechazo de su obra considerada por el nacionalsocialismo como "arte degenerado", principalmente a raíz  de su serie de dibujos realizados sobre 1933 para ilustrar "Les Chansons de Bilitis", obra homenaje del poeta francés Pierre Louÿs al lesbianismo, el periodo de la  II Guerra Mundial y la falta de medios después de esta, volverían a afectar la producción gráfica y pictórica de Mammen y aunque ella nunca dejaría de pintar hasta poco antes de su muerte en 1976, su obra más característica y vital sería la realizada durante el ya citado periodo de entreguerras. 

Jeanne Mammen nunca firmó una obra suya a excepción de la última que pintó en 1974. Ella nunca quiso contar nada acerca de su vida y tampoco creía que fuera necesario acreditar sus obras con una firma. "Mis pinturas son mi hoja de vida", dijo en la única entrevista que concedió con motivo de su 85 cumpleaños. Solo unas pocas fotos de ella y tres autorretratos nos muestran como era físicamente Jeanne Mammen.

Gran pintora olvidada, ha iniciado una merecida resurrección en las dos últimas décadas estando prevista una gran retrospectiva de su obra para el año 2017 en la Berlinische Galerie, Berlín, lugar en el que se puede contemplar en la actualidad su "Revuegirls".

Si quieres ver algo más de la obra de Jeanne Mammen pulsa aquí.


5 comentarios:

  1. Bonjour,

    Merci de me connaître le travail de Jeanne Mammen... Remarquable !
    ❀ Gros bisous ❀

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  2. Interesante información la publicada, no conocía nada de esta pintora y sus obras no dejan indiferente, no es el tipo de pintura que más me gusta pero está bien saber de ella. No conozco Berlín pero todo se andará y así lo tendré en cuenta para una posible visita.
    Muchas gracias por compartir, un cordial saludo.

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  3. Gracias por esta entrada , no sabía de la existencia de esta pintora , he entrado a conocer su obra a través de tu enlace y me ha resultado muy interesante tanto como la vida de su autora.
    Cuando he visto su obra me ha recodado a la obra de cartelería de los años veinte, ¿puede ser que algunas de sus obras las hiciera para usarlas como carteles?

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    1. No hace demasiado tiempo que se completó el catalogo de la obra conocida de esta artista y la misma alcanza un volumen de más de 2000 cuadros, dibujos collages, etc repartidos por todo el mundo y también parece que mucha obra está desaparecida o fue destruída por todo lo cual es posible que como tu indicas realizase algo destinado a cartelería igual que trabajó para revistas de moda (para novias) o para ilustraciones de obra literaria. Me alegro que te haya interesado esta entrada. Gracias a tí por tus visitas y comentarios. Un abrazo.

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  4. Como no la conocía he querido ir admirar algunos de sus cuadros y como bien dices su trabajo se definió como reportera gráfica, el cuadro que nos presentas lo encuentro tan moderno de nuestros tiempos, me gusta mucho.
    Un abrazo.

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