miércoles, 27 de abril de 2011

Mavourneen (Portrait of Kathleen Newton) - James Jacques Tissot


James Jacques Joseph Tissot, (1836-1902), más conocido como James Tissot fue, en contra de lo que se cree, un pintor francés que por motivos políticos y a raiz de la guerra franco-prusiana emigró a Londres donde adoptaría el nombre comercial de James y donde desarrollaría su labor como grabador, caricaturista para la revista "Vanity Fair" y como pintor especializado en las costumbres y la vida de la alta sociedad victoriana en un mundo refinado y burgués y con la mujer como centro de él.

Es en Londres donde realiza sus mejores obras, todas ellas de una belleza y elegancia exquisitas que le catapultan a la fama en pocos años connvirtiéndose en un pintor aclamado por la crítica y solicitado por esa alta sociedad inglesa.

Es en los primeros años de la decada de 1870 cuando aparece en la vida de James Tissot una mujer llamada Kathleen Newton, una bellísima irlandesa veinte años más joven que él, divorciada y madre de una niña y de la que se desconoce como llega a penetrar en la vida del pintor pero que se convertirá en su amante, su musa y su modelo habitual yéndose a vivir con él en 1876 y teniendo un segundo hijo producto de su relación con el pintor.

Desde la entrada de Kathleen en su vida, la pintura de Tissot gira en torno a esta mujer y la va inmortalizando en prácticamente todos los cuadros que realiza en esa década hasta el fallecimiento de ella unos años después. Se conocen bien los cuadros en que la pinta de forma individual pero también la plasma a ella y se autorretrata él en su compañía en escenas que sugieren un viaje o formando parte integrante del lienzo. Así, aparecen en un albergue o esperando una travesía, en una estación de ferrocarril, al borde del agua o navegando por el Támesis.

En el lienzo que hoy traemos la retrata elegantemente vestida, con un abrigo negro con el cuello y los puños de piel y con un gran sombrero también negro que resalta el bello rostro de Kathleen sobre un fondo claro y difuminado. Es un cuadro en el que se nota la influencia de su gran amigo Manet y del retrato que este había realizado en 1872 a Berthe Morisot en el que ella aparece también vestida de negro con un gran sombrero del mismo color y sobre un fondo claro abstracto aunque el acabado de ambos lienzos sea muy distinto siendo más detallado en el de Tissot y más plano en el de Manet.

Kathleen Newton murió en 1882 con tan solo veintiocho años a causa de una sobredosis de láudano, un opiáceo ingerido para mitigar los padecimientos de una tuberculosis terminal y que ella arrastraba desde hacía años.

Para Tissot la muerte de Kathleen fue un auténtico mazazo después del cual abandonaría su estilo pictórico marchando a París y dedicándose posteriormente a un proyecto consistente en ilustrar la Vida de Cristo y el Antiguo Testamento a través de más de 700 acuarelas que realizaría hasta su muerte en 1902

Este cuadro pintado en 1877 pertenece a una colección privada. Se puede ver más obra de Tissot pulsando aquí.

martes, 26 de abril de 2011

La femme à l'éventail (Lunia Czechowska) - Amedeo Modigliani


Modigliani conoció seguramente a la polaca Lunia Czechowska en casa del matrimonio Zborowski en la Rue Joseph Bara, en París, lugar donde ella había aceptado la invitación para  vivir una temporada con este matrimonio mientras su marido, gran amigo desde la infancia de Leopold Zborowski, permaneciese en el frente con motivo de la 1ª Guerra Mundial.

Leopold Zborowski, poeta y escritor polaco, había llegado en 1914 a París para estudiar literatura conociéndo un par de años después a Modigliani con ocasión de una exposición de este en la galería de la Rué Huygehns entusiamándose con la obra de él. Dado que Leopold se ganaba la vida vendiendo libros y grabados, se convirtió en el mecenas de Modigliani proporcionándole los medios, las modelos y hasta un estudio en la Rue de la Grande Chaumiére a cambio de quedarse con toda la producción de Modigliani, cosa que este aceptó.

A través de esta relación de amistad, Modigliani pintó entre 1917 y 1919 en al menos diez lienzos a Lunia Czechowska uno de los cuales fue este en que la retrata abanicándose y vestida con un traje color amarillo chillón que contrasta con el fondo oscuro del mueble situado a su espalda. También la pálida tez de Lunia destaca sobre el rojo intenso de la pared provocando en el espectador la sensación de un calor sofocante que, seguramente, es el que sentía Lunia en aquellos momentos mientras era retratada por Modigliani a la vez que este, sonriente, se bebía una botella de vino y lanzaba exclamaciones en italiano tal y como ella relataría posteriormente en sus memorias.

Cuando Modigliani pintó este cuadro en 1919, su último gran amor era Jeanne Hébuterne a la que había conocido en 1916 y con la que había tenido una hija. Atrás quedaban las pasiones y las noches de amor con un sinfín de mujeres tremendamente enamoradas de aquel pobre y bello pintor enfermo de tuberculosis y roto por el alcohol y las drogas al que sus amigos habían bautizado como “Modi” (maldito).

Con Lunia no se sabe si llegó a tener relación sentimental aunque se piensa que ella estuvo secretamente enamorada de él pero no quiso engañar a Jeanne con la que había llegado a tener una gran amistad.

Cuando en 1920, un año después de pintado este cuadro, Modigliani agonizaba, tres mujeres estuvieron  a su lado, Jeanne Hébuterne, Hanka la esposa de Zborowski y Lunia Czechowska.

Este cuadro fue robado el 20 de mayo de 2010 del Musée d’Art Moderne de la Ville de París junto con otros cuadros de Picasso, Matisse, Braque y Léger y cuyo valor conjunto superó los cien millones de euros. Hasta la fecha no han sido recuperados.

lunes, 25 de abril de 2011

La Pasión de Cristo - Hans Memling


La "Pasión de Cristo" fue encargada al pintor flamenco Hans Memling por el representante de la banca de los Médicis en Brujas, Tommaso Portinari, con motivo de su boda, apareciendo retratados él y su esposa en los extremos inferiores del cuadro.

En esta pequeña tabla de solo 55 x 90 centímetros, Memling plasma toda la Pasión de Cristo en diferentes secuencias desde su entrada en Jerusalén que aparece representada en la esquina superior izquierda hasta su Crucifixión y Resurrección que se refleja en el margen derecho de dicha tabla. Así, podemos ver los detalles de la expulsión de los mercaderes del templo, la celebración de la Última Cena con sus discipulos, la oración en el huerto de Getsemaní, el beso de Judas, el juicio ante Pilatos, el camino al calvario, la Crucifixión, el Descendimiento, el Entierro, la bajada al Limbo y la Resurrección, todo ellos sumando más de veinte episodios que se suceden uno tras otro permitiendo al espectador repasar la Pasión desde su inicio hasta el final.

El matrimonio Tommaso Portinari quedó así inmortalizado en esta tabla pintada entre 1470 y 1471, tabla que sería llevada a Florencia y donada al hospital de Santa María Nuova. Después pasaría por las manos de Cosme de Médicis y del papa Pío V quién la cedió a un convento de dominicos en la localidad de Bosco, cerca de Alessandría, donde quedaría escondida con motivo de la invasión napoleónica en 1796 hasta 1814 en que salió de su escondrijo siendo donada al rey Victor Manuel I quién la cedería en 1832 a la Gallería Sabauda en Turín donde se puede contemplar actualmente.

Dos retratos más del matrimonio Portinari, también pintados por Hans Memling, se conservan en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York.

Pulsando aquí se puede ver una recreación de esta tabla escuchando la música de François Couperin.

jueves, 14 de abril de 2011

Retrato de Fernando Pessoa - Almada Negreiros


José Sobral de Almada Negreiros (1893-1970) fue un pintor, escritor, dramaturgo, poeta y novelista portugués y una figura primordial en el nacimiento de las vanguardias portuguesas de principios del siglo XX.

Una de las pocas imágenes pictóricas que se conocen de Fernando Pessoa es esta que hoy vemos y que Almada Negreiros pintó casi veinte años después de muerto el poeta y escritor portugués.

Gran amigo de Pessoa al que conocería con motivo de una exposición de caricaturas en Lisboa en 1913 le retrata de memoria en este cuadro con un estilo neocubista y con los elementos emblemáticos de Pessoa, es decir, su estilográfica, un cigarrillo y una taza de café. El libro con el número 2 corresponde al segundo ejemplar de la revista "Orpheu" una revista fundada por Almada, el propio Pessoa y una serie de intelectuales entre los que se encontraba el brasileño Eduardo de Guimaraens y Mário de Sá-Carneiro y de la que solo se llegarían a editar dos ejemplares.

Este cuadro, según relata Manuel García Castellón, figuró durante años en "Irmaos Unidos" un restaurante-café que fue durante años una versión lisboeta del madrileño "Café de Pombo". Cuando dicho establecimiento cerró en 1969 el cuadro salió a subasta vendiéndose por un precio superior al que nadie habría esperado para aquellos años.

Ya que hablamos del "Cafe de Pombo", hay que comentar que Almada pasó largas temporadas en España asistiendo a veces a las tertulias de dicho Café ya que llegó a convertirse en un buen amigo de Ramón Gomez de la Serna a raiz de un homenaje que Almada le promoviera en Lisboa en 1925.

En este cuadro póstumo, Fernando Pessoa, elegantemente vestido e iluminado por esa claridad que penetra por la izquierda del cuadro, parece estar escribiendo ese poema suyo:

"Es tal vez el último día de mi vida.

He saludado al sol levantando la mano derecha,

mas no lo he saludado diciendo adiós.

Hice la seña de que me gustaba verlo antes: nada más."

miércoles, 13 de abril de 2011

Kiki de Montparnasse a la robe rouge - Moise Kisling


Alice Ernestine Prin, más conocida como "Kiki de Montparnasse", fue modelo, musa y amante de numerosos artistas, así como cantante, actriz y pintora aficionada en el París de los años veinte.

Hija ilegítima, nacida en 1901 en la localidad francesa de Châtillon-sur-Seine, fue criada por su abuela materna hasta 1913 en que llegó a París , lugar en el que con muy pocos años empezó a frecuentar los cafés del barrio de Montparnasse relacionándose con la colonia de artistas de todo tipo y de todas las nacionalidades establecidos en este barrio, nuevo centro de la renovación artística parisina y que venía a  sustituir al ya caduco Montmartre.

En Montparnasse fue modelo de numerosos escultores y pintores posando para Maurice Mendjisky, Alexander Calder, Moïse Kisling, Foujita, Pablo Gargallo, Modigliani, Chaim Soutine y Kees van Dongen, artistas con muchos de los cuales mantuvo una relación sentimental aparte de la meramente profesional.

Su gran amor fue el fotógrafo Man Ray con el que mantuvo una relación amorosa pero intermitente desde 1922 hasta 1929 y que la inmortalizaría en una serie de fotos históricas como el famoso fotomontaje del "Violín de Ingres" realizado en 1924.

Kisling, el pintor polaco, amigo de Jules Pascin y de Modigliani, compartió con ellos en Montparnasse aquella residencia para artistas con pocos recursos denominada "La Ruche" (La colmena) y compartió también con ellos a "Kiki" como modelo y como amante. Kisling la pintó en numerosos cuadros, en casi todos desnuda a excepción de este y otro posterior en que la pintó también con un jersey rojo, pero, en todos ellos, la plasmó sin ninguna carga erótica, con un aire entre melancólico y soñador y con una mirada perdida en algún lugar.

"Kiki de Montparnasse" fue la reina de París. La "Garconne" reina de la noche. Amiga de Picasso, Cocteau, André Breton, Hemingway y tantos otros, se cuenta que dijo: "Todo lo que necesito es una cebolla, un poco de pan y una botella de vino tinto y yo sé que siempre encontraré a alguien que me lo ofrezca”

Sus enormes ojos se cerraron en 1953 y descansa en el cementerio de Montparnase bajo una lápida en la que está grabado únicamente su apodo: "Kiki"

Este cuadro pintado en 1933 se conserva en el Musée du Petit Palais, Ginebra.

Si quiere ver un agradable video referido a Kiki de Montparnasse pulse aquí.

martes, 12 de abril de 2011

Giovanna Tornabuoni - Domenico Bigordi (Ghirlandaio)


Este cuadro es la imagen de la belleza en el recuerdo.

Bella y elegante, Giovanna degli Albizzi, murió con solo veinte años dejando viudo a su enamorado esposo Lorenzo Tornabuoni con el que solo hacía dos años que se había casado y del que esperaba su segundo hijo.

Sumido en el dolor, Lorenzo Tornabuoni encargó a Ghirlandaio un retrato de la que había sido su bella esposa para lo que entregó a este el único documento en el que inspirarse consistente en una moneda acuñada por el grabador Niccoló Florentino con motivo de los esponsales y en la que aparecía la imagen de Giovanna representada de perfil, con una joya adornando su cuello y una inscripción con su nombre.

Ghirlandaio que había iniciado los trabajos encargados por el padre de Lorenzo consistentes en la realización de los frescos de la Capilla de los Tornabuoni en la Iglesia de Santa Maria Novella en Florencia, realizó un estudio previo de la imagen de Giovanna pintándola entre 1489 o 1490 en uno de dichos frescos, concretamente el de La Visitación y en el que la representó de cuerpo entero pero idénticamente vestida, peinada y enjoyada tal como luego la pintaría en la tabla que hoy vemos.

Giovanna aparece vestida con un bello traje adornado con brocados de oro, cintas y flores bordadas en las mangas y sujetando un pañuelo con sus manos en las que se aprecian dos elegantes anillos de oro.

Anudado al cuello lleva un cordón del que penden tres perlas y un rubí - adorno que nos trae a la mente los recientes modelos de la joyería actual - una joya similar a la que se observa en la hornacina del fondo formada por un broche con un dragón, dos perlas y un rubí, joyas ambas indicadoras del alto status social que ocupaba Giovanna dentro de la sociedad florentina de la época.

A la derecha del cuadro aparece un libro, seguramente un libro de horas o devocionario de los que tenían las madres de familia y que debían leer cada día para inculcar las buenas costumbres a la familia.

Colgado de un clavo aparece también en la hornacina trasera un collar formado por cuentas de coral, un tipo de collar este que aparece en muchos cuadros renacentistas y anteriores al renacimiento y que solía colocarse como amuleto a los niños recién nacidos para protegerlos de posibles males y de los que se decía que sus cuentas estaban coloreadas por la sangre de Cristo. Tal vez Ghirlandaio lo pintó ahí colgado como un símbolo del niño que nunca llegó a nacer.

El cuadro lleva un letrero con una frase del poeta Marcial que podemos traducir como: “Oh arte, si pudieras pintar las costumbres y el alma, no habría una pintura más bella sobre la tierra” fechado en 1488 año que corresponde al de la muerte de Giovanna Tornabuoni.

Este cuadro, de una belleza increible, es según palabras de Guillermo Solana, Director Artístico del Museo, “la joya entre las joyas” del Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid, museo en el que se puede admirar esta obra.

Si dispone de algo más de una hora y quiere saber casi todo sobre este cuadro a través de un estupendo documental que recoge una conferencia de Guillermo Solana explicando su historia, pulse aquí.

lunes, 11 de abril de 2011

Caféterras (Cafés terraza) - Willem Hofhuizen


Hofhuizen, aunque nacido en Amsterdam, estaba enamorado del Mediterráneo y de ello son prueba los numerosos viajes que realizó por Egipto, Italia, España, Portugal y Francia, país este último donde permaneció cerca de un año en la ciudad de París.

Ese mundo tan mediterráneo de las terrazas es el que plasmó en una serie titulada “Caféterras” (Cafes terraza) en donde refleja ese mundo cálido y cosmopolita de los cafés con sus mesas al aire libre abarrotadas de clientes que observan y buscan ser observados y que  aprovechan esos primeros rayos de sol que anuncian la llegada del buen tiempo para alegrar el alma y el cuerpo.

En las mesas de los cafés pintados por Hofhuizen siempre hay vistosas mujeres de poderosos muslos que quedan a la vista del espectador convertido en voyeur a la fuerza. También aparece en casi todos estos cuadros un camarero elegantemente vestido, con su corbata o pajarita negra y también a menudo un hombre con barba sentado en alguna de estas mesas y que Hofhuizen identifica con él mismo.

Willen Hofhuizen vivió gran parte de su vida en Maastricht, lugar en el que murió en 1986 y en el que era muy apreciado. Muchos vecinos le recuerdan sentado en alguna de aquellas terrazas de esta bella localidad tomando una buena cerveza o pintando una de esas escenas como la que hoy vemos repleta de colorido y sensualidad.

Más cuadros de la serie “Caféterras” en esta página.

domingo, 10 de abril de 2011

Dos mujeres abrazándose - Jan Sluitjers


Jan Sluitjers (1881-1957) se puede considerar uno de los artistas más importantes del siglo XX dentro del grupo de los pintores figurativos holandeses.

Iniciado en la pintura en Amsterdam donde pasaría la mayor parte de su vida, sus primeros viajes a París y su contacto con los neo-impresionistas y fauvistas le marcaron profundamente, en especial su relación con Toulouse -Lautrec y Kees van Dongen. Un crítico llegó a afirmar que "la influencia del monstruo de Montmartre" (Kees van Dongen) era claramente visible en los contornos y el colorido de sus cuadros.

Junto con Mondrian formaría en 1911 la "Sociedad de Arte Moderno" introduciendo nuevos estilos procedentes de Francia entre ellos el luminismo, experimentando así mismo con el cubismo y el futurismo. 
Su tema favorito fueron las escenas provocativas o audaces realizadas por mujeres así como los cuadros de desnudos en los que retrató a sus numerosas modelos y amantes, entre ellas, una mulata llamada Tonia Stieltjes y a la que retrataría en numerosas ocasiones.

Uno de estos cuadros provocativos y que fue motivo de escándalo fue el que hoy vemos y en el que representó a dos mujeres abrazándose mientras se besan efusiva o apasionadamente. Jan Sluijters acababa de ganar en 1906 el Premio de Roma, el premio más importante del arte holandés por el que recibía una beca para estudiar en el extranjero durante cuatro años pero, el conocimiento por parte del jurado de la existencia de esta obra pintada unos meses antes durante su estancia en París, hizo que se le denegase la continuidad de dicha beca tachándose dicha obra de provocativa e inmoral.

Con respecto al catálogo de la obra de este pintor, se sigue trabajando para intentar valorar el tamaño de la misma que hasta la fecha es desconocida no existiendo además información definitiva acerca de la autenticidad y datación de muchas piezas. En la actualidad se encuentran catalogadas unas 1700 obras.

Jan Sluitjers fue condecorado en varias ocasiones y en 1952 nombrado caballero de la Orden de la Nederlandse Leeuw (una orden real holandesa).

Este cuadro pintado en 1905 se exhibe en el Van Gogh Museum de Amsterdam.

jueves, 7 de abril de 2011

Rabbi With Cat - Natalia Goncharova


Sobre Natalia Goncharova comentábamos en la última entrada que fue la compañera sentimental y profesional de Mikhail Larionov y una pintora destacada de la "avant-garde" rusa afincada en París a comienzos del siglo XX.

Ambos se influyeron artísticamente el uno al otro y fueron influídos por todas las corrientes pictóricas de ese periodo como el impresionismo, el cubismo y el fauvismo. Crearon además sus propios movimientos artísticos como los ya citados en la anterior entrada: "La Cola de Burro", "La jota de Diamantes" y el "Rayonismo". Goncharova fue miembro también desde sus comienzos en 1911 del movimiento vanguardista "Der Blaue Reiter" (El jinete azul), el movimiento fundado en Munich por Wassily Kandinsky para la defensa de la igualdad de derechos de las distintas manifestaciones artísticas.

Seguidora del flolklore, lo étnico y el primitivismo, sus viajes por Suiza, Italia y España acompañando a Diaghilev y junto a Larionov, le sirvieron para producir parte de su obra como en el caso de su estancia en España país del que se enamoraría y que le inspiró su serie de las "españolas" entre 1915 y 1916, el mismo año en el que Natalia diseñaría la escenografía y el decorado de los ballets "Triana" (pieza basada en la "Rapsodia española" de Maurice Ravel) y "España" (con música de Isaac Albéniz), obras para Sergei Diaghilev y que no llegarían a estrenarse. Su atracción por lo español sería después una constante en su obra y a lo largo de toda su vida artística.

A pesar de su estancia fuera de su país natal, Goncharova nunca olvidaría sus raices y sus vivencias, algo que también le pasó a su compañero Larionov y que quedó reflejado en muchas de las obras de ambos.

Seguramente, una de esas vivencias que a ella le afectarían siendo una niña, serían los sucesivos "pogroms" o persecuciones que los judíos sufrieron en la rusia zarista desde 1881, año en que es asesinado el zar Alejandro II atribuyéndose su muerte a los judíos, hasta 1892 en que son expulsados de Moscú recrudeciéndose posteriormente estas persecuciones durante las dos primeras décadas del siglo XX.

En este cuadro, de clara influencia fauvista, Goncharova pinta a un rabino acariciando a un gato mientras unos hombres salen con unos sacos cargados a sus espaldas. Seguramente, la escena corresponde a uno de esos "pogrom" en el que unos judíos abandonan apresuradamente sus hogares llevándose sus pertenencias mientras el rabino acaricia a su gato por última vez antes de marchar él también. La mano de Dios aparece por la esquina superior izquierda.

El cuadro pretende ser un recuerdo y un mensaje sobre el sufrimiento y la intolerancia religiosa que ella percibiría y que plasmó en 1912.

Se conserva en la Scottish National Gallery of Modern Art, Edimburgo.

Para saber más de Natalia Goncharova pulsa aquí.

martes, 5 de abril de 2011

La Venus de Katsap - Mikhail Larionov


Mikhail Larionov (1881-1964) fue un pintor ruso formado en la escuela de Moscú por su maestro Konstantin Korovin a través del cual se introduciría en las fuentes del impresionismo.

En 1906 viajó a París con su pareja, la también pintora Natalia Goncharova para colaborar en la exposición de arte ruso que Serguéi Diáguilev - el que luego sería fundador de los famosos Ballets Rusos - preparaba para presentar en el Petit Palais.

Afincado en París, con su compañera Goncharova, no perdería de vista todo el movimiento pictórico prerevolucionario de Rusia liderando el grupo de vanguardia formado por pintores como Varvara Stepanova, Alexander Rodchenko, Nadezhda Udaltsova, Drevin Alexander, Olga Rozanova, Pestel Vera y Zhegin Lev entre otros.

Con Goncharova, a la que estuvo unido profesional y sentimentalmente toda su vida, fundó movimientos pictóricos tan carácterísticos como fueron "La Cola de Burro", "La jota de Diamantes" y el "Rayonismo" un movimiento de corta duración pero que fue pionero en la abstracción y una síntesis del cubismo, el futurismo y el orfismo.

A pesar de estos cambios de estilo, Larionov siempre estuvo marcado por la atracción que sobre él ejercía el primitivismo basado en su cultura y en la tradición. Apoyado en ese primitivismo pintó en 1912 este cuadro "La Venus de Katsap".

"La Venus de Katsap" tiene una clara influencia de las Venus que hemos visto estos últimos días, la Venus de Tiziano y la Olympia de Manet pero, sin llegar a perder la sensualidad que ambas trasmiten, tiene una clara connotación etnica o primitiva. Es tal vez una prostituta si nos atenemos al simbolismo que representa el gato que aquí aparece en una especie de tapiz o ventanal pero es seguramente una prostituta campesina, una mujer que ejerce en su propio hogar rural.

El apelativo de Katsap no se sabe exactamente a que corresponde y son varios los estudios y las opiniones que se han elaborado sobre esta palabra. Katsap es una palabra ucraniana que se usaba como un epíteto contra los soldados del ejercito ruso por lo que, tal vez, se podría interpretar que la mujer del cuadro era una prostituta a la que acudían dichos soldados.

Esta obra se conserva en el Nizhny Novgorod State Art Museum y forma parte de la serie de las numerosas "Venus" que pintó principalmente ese mismo año de 1912 presentando muchas de ellas una composición similar a esta como es el caso de la Jewish Venus (La Venus de los Judíos), cuadro que se conserva en el Museo Estatal Ruso de San Petersburgo.


Para ver un vídeo sobre la obra de Larionov pulsa aquí.


lunes, 4 de abril de 2011

Olympia - Edouard Manet











Siguiendo la huella de la "Venus de Urbino", cuadro que veíamos ayer, pintó Edouard Manet su "Olimpia".

Si la "Venus" pintada por Ticiano resultaba claramente erótica y sugerente, Manet no solo no se quedó atrás sino que buscó que el espectador percibiese que la mujer allí tumbada era una mujer dispuesta a ofrecer su cuerpo, una prostituta al alcance de todo el que la desease a diferencia de la cortesana de Ticiano, una mujer que parece esperar a un solo hombre, su amado o su reciente marido, y al que desea seducir con su sensual pose.

Manet carga a su modelo con elementos que aumenten y manifiesten la sensualidad o la riqueza vulgar. Ella lleva una gran orquídea en el pelo, un brazalete de oro, pendientes de perlas y un cordón anudado al cuello del que pende un adorno así como unos zuecos dorados uno de los cuales descansa sobre la cama. Al borde de esta, una mujer negra que parece inspirada en un cuadro de Ingres, le ofrece un ramo de flores que ella no mira como si despreciase al donante de las mismas, flores que, según cuentan los textos, era corriente su entrega por los clientes a las prostitutas de lujo. El perrillo tranquilo y sumiso que aparecía enroscado sobre la cama a los pies de la "Venus" de Tiziano es sustituido en esta escena por un gato negro del que se aprecia el brillo de sus ojos y su lomo arqueado, reflejo de una actitud defensiva y cuya presencia, se estima, simboliza la promiscuidad o la idea de la prostitución.

La modelo que dió vida a "Olympia" se llamaba Victorine Meurent y fue modelo de Manet desde 1862 hasta 1874 siendo principalmente conocida por este cuadro y por otro famoso cuadro pintado también en 1863, "Déjeuner sur l'herbe". Victorine fue además una buena pintora que llegó a exhibir su obra en el Salón de París en 1875 y de la que se ha conseguido recuperar recientemente parte de su olvidada obra.

El cuadro de "Olympia" fue presentado por Manet en el Salón de 1865, dos años después de pintado, y las críticas que recibió fueron despiadadas. "Están lloviendo insultos sobre mí. Alguien debe estar equivocado", escribió el artista a su amigo, el poeta francés Charles Pierre Baudelaire. El crítico Jean Ravenel escribió en un articulo sobre el cuadro que cuando los visitantes contemplaban el cuadro era como estar viendo, la viciosa extrañeza de una joven de los suburbios de París o una mujer de la noche del "Paul Niquet" - un cabaret o burdel de París que gozaba de una pésima reputación -, una flor del mal o una pesadilla de Edgar Poe. Solo Emile Zola, amigo y defensor de Manet, consideraría esta obra como una obra maestra, cosa que el pintor le agradecería retratándole unos años más tarde, sentado, leyendo en una estancia en una de cuyas paredes está colgada una reproducción de la "Olympia".

En 1889 fue presentada en la Exposición Universal de París, donde la pretendió comprar un coleccionista americano. El pintor Sargent advirtió a Claude Monet el cual inició una suscripción popular para comprar la Olympia y donarla al Estado cosa que se consiguió siendo trasladado este cuadro al museo del Louvre en 1908.

En la actualidad se puede contemplar en el Musée d’Orsay, París.


domingo, 3 de abril de 2011

La Venus de Urbino - Tiziano Vecellio


Este cuadro se conoce como “La Venus de Urbino” por haber sido encargado a Tiziano por Guidobaldo II della Rovere el mismo año en que este se convertía en Duque de Urbino debido al fallecimiento de su padre, Francesco María della Rovere, el cual ostentaba dicho título.

Mucho se ha especulado acerca del motivo por el que el nuevo Duque de Urbino encargó en 1538 el retrato de esta mujer completamente desnuda y con una fuerte carga erótica en la pose y la mirada. Algunos han llegado a decir que fue un retrato de su primera mujer, Giulia da Varano, lo cual no es cierto, ya que esta modelo, bellísima y de nombre desconocido, es la misma que posó para Tiziano en otros cuadros anteriores como en el “Retrato de muchacha con pelliza” (1535), en “La Bella” (1536) o en el “Retrato de muchacha con sombrero de plumas” (1536). Los expertos e historiadores se basan más bien en el carácter decorativo o nupcial que tenían un cierto tipo de cuadros semejantes a este pintado por Tiziano y que se usaban para decorar los dormitorios después de una boda, cuadros en los que predominaban las Venus, los Cupidos y una serie de símbolos como flores, flechas, ropajes o animales relacionados con el amor sensual o conyugal.

Se estima que Tiziano se inspiró para este cuadro en la "Venus dormida" (Venus de Dresde), un cuadro pintado en 1510 por Giorgio Barbarelli, cuadro inacabado al fallecer este pintor ese año y que terminaría el propio Tiziano por lo que es evidente que este le debió servir  casi como estudio previo para su posterior obra.

Aunque de composición similar en cuanto a la colocación y pose de la modelo,  el cuadro de Barbarelli no presenta el carácter erótico y algo misterioso del cuadro de Tiziano. En la "Venus dormida", la modelo duerme en plena naturaleza con un paisaje bucólico-rural a sus espaldas mientras que en la "Venus" de Tiziano la modelo está tumbada sobre un revuelto lecho en una estancia palaciega y observa al espectador sugerentemente.

El cuadro parece componerse de dos cuadros que quedan diferenciados por la cortina situada a la espalda de la modelo y que llega hasta la línea del pubis. Un cuadro sería el de una voluptuosa imagen de una mujer desnuda, una cortesana oferente en la que se proyecta la luz que proviene de fuera del propio cuadro y el otro, el que representa una escena casi doméstica en que dos mujeres buscan o guardan ropajes en unos grandes arcones, situados en otra estancia en la que penetra la luz a través de un gran ventanal.

De esta composición existen los seguidores y los detractores, los que opinan que Tiziano se cargó el cuadro al colocar esa segunda imagen y los que opinan que sin esa segunda imagen el cuadro no tendría la carga y la fuerza de lo renacentista.

Un cuadro mágico, lleno de simbolísmos y que se puede contemplar en la Galleria degli Uffizi, Florencia y en el que se inspirarían numerosos pintores para la realización de nuevas obras maestras, algunas de las cuales veremos más adelante.

Aquí un poco de música de Claudio Monteverdi mientras observamos a la "Venus de Urbino."

viernes, 1 de abril de 2011

Retrato de Olga - Francis Picabia


Hablar de Francois Marie Martínez Picabia (1879-1953) como pintor resulta complicado pues es imposible encasillarle en ningún estilo. Tocó todos los palos y todos los ismos que le rozaron y de todos recibió su influencia. Picabia fue impresionista, nabi, fauvista, abstracto, cubista, orfista, dadaista, realista y al final de su vida, casi casi, hasta precursor del pop-art.

De ascendencia burguesa, nació en París donde su padre era agregado consular de la embajada de Cuba. Una primera herencia de su abuela en 1900 le permitiría montarse una vida relajada en pleno Montmartre con su primer amor Ermine Orliac y empezar a tomar contacto con el mundo de los impresionistas, los nabis y los fauvistas.

A Hermine Orliac la dejaría en 1909 para casarse con Gabriele Buffet, una joven músico con la que llegaría a tener cuatro hijos. Este matrimonio coincidió con la relación de Picabia con Marcel Duchamp y Jacques Villon y su integración en el grupo cubista cercano a la abstracción llamado el "Grupo de Puteaux".

Despues llegarían el éxito de sus cuadros en Nueva York en 1913, la guerra mundial, Cuba, los viajes y las largas estancias en Barcelona, el Caribe, otra vez Nueva York, sus cuadros sobre "mecanismos" y su incursión en el dadaismo, todo ello llevando siempre una vida bohemia pero rodeada de lujo y que incluiría la separación de su mujer Gabrielle en 1919 para establecerse en un apartamento en París con su nueva amante, Germaine Everling con la que tendría un hijo un año después y al que llamarían Lorenzo.

A partir de 1921, Picabia se iría separando cada vez más del movimiento Dadaista rompiendo definitivamente con ellos después de la entrada de Breton y su fundación del movimiento surrealista. A todo esto, una segunda herencia percibida en 1923 por la muerte de su tío le permitiría continuar con su ritmo de vida de alto nivel convirtiéndose en un enamorado de los yates y los coches deportivos y de lujo de los que llegaría a tener cerca de un centenar. También esta herencia le permitiría abandonar París y establecerse en Mougins, una localidad situada en la vertical de Cannes en plena Costa Azul y donde se construiría una vivienda conocida como el "Chateau de Mai".

A este Chateau llegaría una joven suiza llamada Olga Moehler - la mujer del cuadro que hoy visitamos - contratada como niñera para cuidar al pequeño Lorenzo y que acabaría apartando a Germaine de la vida de Picabia para convertirse en su mujer al casar con él en 1940.

Picabia pintó a Olga Moehler en 1934 dentro de su vuelta pictórica al realismo de acuerdo con las directrices que pregonaba su amiga Gertrude Stein pero, todavía, bajo el efecto de las transparencias, un recurso consistente en superponer imágenes unas sobre otras y que Duchamp definió como “la tercera dimensión sin el recurso de la perspectiva”.

Olga Moehler sobrevivió a Francis Picabia, mantuvo un largo pleito de más de treinta años con los hijos del artista y obtuvo de los tribunales franceses la autoridad moral sobre su obra.

Murió en el año 2002.

Un video relativo a su obra se puede ver pulsando aquí.