jueves, 24 de febrero de 2011

Perspective: Madame Récamier de David - René Magritte


Cerramos hoy la trilogía dedicada a Madame Recamier con este cuadro surrealista de Magritte.

Irónico y cruel a la vez, Magritte utiliza su llamado "realismo mágico" para jugar, como siempre, con lo que vemos en el cuadro y lo que de verdad esconde.

Aquí, en un recordatorio de lo efímero de la vida y de sus lujos y placeres, Juliette Recamier ha sido sustituida por un féretro dispuesto en la misma posición que ella adoptaba posando para el pintor Jacques-Louis David. El glamour, la riqueza y la belleza han desaparecido y solo queda ese vestido helénico apresado por un ataúd que descansa sobre el triclinio a la espera de que termine la sesión de posado.

Este cuadro, pintado en 1951, se conserva en la Galería Nacional de Canadá, Ottawa.

1 comentario:

  1. Personalísima visión de la realidad la que realiza Magritte, siempre provocador, mostrándonos otra realidad que por supuesto también existe, sólo hay que poner un poco de atención y desgranar su significado.
    En este cuadro te encuentras de bruces con una realidad que cualquiera trataría de eludir y casi resulta cruel si la comparamos con el placer de vivir la vida expuesto en el cuadro anterior.

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